Automóvil

El seguro del automóvil es un contrato de seguro que cubre los riesgos creados por la conducción de automóviles en caso de causar un accidente.

En España, el seguro del automóvil está regulado por el Real Decreto Legislativo 8/2004, de 29 de octubre, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley sobre responsabilidad civil y seguro en la circulación de vehículos a motor.

Esta regulación indica que todos los vehículos a motor del estado español deben contar con un seguro que cubra, al menos, la Responsabilidad Civil Obligatoria. Esta obligación afecta a todos los vehículos a motor inscritos en la Dirección General de Tráfico, incluso aun cuando no transiten por vías públicas.

El seguro de Responsabilidad Civil Obligatoria tiene como objetivo principal cubrir cualquier daño a terceros que podamos causar mientras conducimos nuestro coche. Los daños causados a terceros, tal y como recoge el Reglamento del Seguro Obligatorio de Responsabilidad Civil en la Circulación de Vehículos a Motor, pueden ser de dos tipos:

  • Físicos o personales: Es el daño causado a personas, ya sea a cualquiera de los ocupantes de otro vehículo como a un peatón.

  • Materiales: Cualquier daño causado en otro coche, propiedad o en el mobiliario urbano.

, Automovil, mg10seguros
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Seguros a Terceros

Los daños a terceros son aquellos que tú, como conductor, causas a otras personas de tu entorno o entidades.
La responsabilidad de arreglar estos daños y/o indemnizar a estas personas por el perjuicio causado recae sobre la persona causante como dueño un vehículo.

Incluye la Responsabilidad Civil, Responsabilidad Obligatoria limitada a 50 millones de euros, la Protección Jurídica, Seguro de Conductor/Ocupantes y la Asistencia en Viaje.

Seguros a Terceros Ampliados

El seguro de coche a terceros ampliado cubre todos los supuestos del Terceros básico, además, incorpora otras coberturas relacionadas con siniestros de mayor magnitud, como el robo, el incendio o la rotura parcial o total de lunas/parabrisas.

Todo riesgo

En el seguro a todo riesgo se incluyen las coberturas de las modalidades anteriores, pero se añaden además los daños propios por definición.
Dentro de esta modalidad existe la opción de contratar un seguro a todo riesgo con franquicia que consiste en un acuerdo con tu aseguradora donde se pacta una cantidad mínima a pagar en caso de siniestro. De esta manera, se reduce la prima del seguro y, en caso de que la reparación sea superior a la franquicia, la aseguradora se encarga de la parte que supere dicho importe acordado siendo normalmente de unos 150€, 200€, 300€, 450€ y 600€.